Por qué Sans Graphic
La verdad es que, cuando elegí el nombre comercial que iba a representar a mi empresa, no pensé que el 80% de mis clientes seguiría escribiéndolo y pronunciándolo mal después de más de una década trabajando juntos…
En fin. Aunque no niego que más de una vez he pensado en darle una vuelta a todo esto y buscar algo más comercial, directo y fácil de recordar, no lo voy a hacer por ese pequeño porcentaje de personas que, con el tiempo, ha conseguido aprenderlo. Ya forma parte de mí. Además, ya no concibo un día sin que alguien invente su versión alternativa: Sans Grafic, Sas Grafi, Sans Grafitti, San Gráfico (este debe de ser el santo patrón de Photoshop), y un largo etcétera.
Sans Graphic es mi marca, mi caos y una gran parte de mi identidad.
Detrás del nombre
Detrás de cada marca hay una historia, y en el caso de Sans Graphic, esa historia empieza con mi propio nombre. Me llamo Santos en honor a mi abuelo paterno, aunque desde hace muchos años mis conocidos me llaman Sans. Ese apodo se volvió parte de mi identidad: natural, cercano y fácil de recordar. Por eso, cuando llegó el momento de crear mi empresa, tuve claro que debía formar parte del nombre.
El origen del concepto
Además del apodo, hubo otro detalle que encajaba perfectamente: en francés, “sans” significa “sin”.
Una palabra muy presente en el mundo del diseño: todos conocéis las tipografías sans serif (sin serifa) o la mundialmente famosa Comic Sans.
Y a partir de ahí nació la idea:
Sans Graphic, que puede interpretarse como “sin gráficos”.
Su significado es claro y directo:
Si no tienes gráficos, si tu marca está sin diseño, sin identidad visual… aquí los creamos.
Lo que representa Sans Graphic
Sans Graphic es una mezcla de lo personal y lo profesional. Es mi apodo convertido en marca. Es sencillo y, al mismo tiempo, complejo. Es mi manera de comunicar y de crear para clientes que, muchas veces, llegan literalmente “sans graphic”. Y ahí entro yo.